Friday, January 5, 2018

Encontrando al rey entre los pobres

La Epifanía del Señor 
7 de enero de 2017 
Notas para una homilía 
Mateo 2, 1-12

Hoy terminamos el tiempo de la Navidad con la fiesta de la Epifanía, cuando celebramos la manifestación del Niño Jesús a los magos, sabios del oriente.

No sabemos cuantos magos eran, ni exactamente de donde salieron. Pero, fueron algunos hombres ricos (llevando oro, incienso y mirra) que estudiaban los cielos. En este tiempo muchos miraban una estrella nueva como signo de que un nuevo rey o un hombre importante había nacido.


Siguiendo la estrella, llegaron a Jerusalén, la gran ciudad de David, donde reinaba el rey Herodes, un tirano represivo que fue secuaz del emperador romano. Fue un hombre de poder, que dominaba todo.

Allí, pensaron los magos, pudieron encontrar el nuevo rey, recién nacido. Pero no.

El nuevo rey no se encuentra en las ciudades grandes, en los centros de poder político o económico. El nuevo rey se encuentra en la pequeña aldea de Belén.

Hay dos mensajes para nosotros hoy.

Primero, el nuevo rey, que es el Dios de los cielos y la tierra, no se encuentra entre los poderosos, los grandes. El Dios se encarnó de una virgen campesina en un lugar pobre. La palabra se hizo carne, Dios se hizo pobre.

Nuestro Dios quiere solidarizarse con los pobres, los débiles, los frágiles, para poder enseñarnos que él ha venido no para ser servido, sino para servir. Y, más, quiere servir no como alguien desde afuera con poder y dinero, sino como uno de nosotros, uno de los pobres.

Tal vez los magos estaban confundidos de no encontrar el rey entre los poderosos, pero cuando miraron la estrella, la siguieron con gran alegría. Dios se encuentra entre los pobres.

Segundo, los magos, buscando el rey entre los poderosos, siguieron sus propios prejuicios. No estaban abiertos a las diferentes manifestaciones de Dios. Se necesitaron nuevos ojos, nuevos oídos y, más que todo, nuevos corazones para abrirse a la revelación de Dios.

A veces, no estamos abiertos a nuevas manifestaciones de Dios, apegados a nuestras imágenes de Dios. Pero, Dios quiere revelarse en diversas maneras.

Pero, tenemos que estar abiertos a las maravillas de Dios –

Y si estamos, como los magos, volvimos a casa por otro camino – maravillados por encontrarnos con Dios, listos para confundir los tiranos como Herodes.


Sigan mirando la estrella – Dios se manifiesta entre nosotros, entre los pobres.